Sergio Massa presentó su primer paquete de medidas incluyendo a jubilados y asalariados de los sectores más bajos.

También adelantó ayer una reducción de los subsidios a la energía a través de aumentos en las tarifas de luz y gas, el congelamiento de la planta de empleados y mecanismos para fortalecer las reservas del Banco Central (BCRA).

El ministro de Economía confirmó que se mantendrá la meta de déficit fiscal de 2,5% del PBI acordada con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Massa indicó que no se pedirán más adelantos transitorios al Banco Central y señaló que se financiará el gasto fiscal con recursos del Estado y deuda del sector privado. Según lo acordado con el FMI, esta forma de financiamiento se limitó a 1% del PBI en el año.

Una de las principales medidas apunta a la liquidación de divisas, en ese sentido se les dará un beneficio especial a los sectores del agro, la pesca y la minería. Apuesta a que se liquiden US$5000 millones en los próximos 60 días, aunque no se especificó qué incentivo se dará.

Además, Massa adelantó que habrá un desembolso por US$1200 millones de organismos internacionales por programas vigentes y que se negoció un nuevo programa con la CAF, que implicará un nuevo desembolso de US$750 millones adicionales.